Un nuevo tipo de cooperación entre China y América Latina
2021-09-12PorGUOCUNHAl
Por GUO CUNHAl
Guo Cunhai, director de la División de Sociedad y Cultura del Instituto de América Latina, Academia China de Ciencias Sociales y coordinador del Centro de Estudios Chinos y Latinoamericanos en Beijing.
DESDE principios del siglo XXI, la relación entre China y América Latina se ha ido profundizando con mucha más fuerza y hacia una mayor cooperación, que ya no solo se limita al tradicional ámbito político y económico, sino que incluye intercambios culturales, experiencias compartidas y el aprendizaje mutuo entre civilizaciones, además de otros ámbitos. La crisis de salud pública mundial provocada por el COVID-19 en 2020 ha sacado a la luz la necesidad y urgencia de construir un nuevo tipo de relación entre China y Latinoamérica orientada al intercambio de conocimientos y cooperación.
Intercambio y cooperación en base a experiencias de desarrollo
Tanto China como América Latina pertenecen al mundo en vías de desarrollo, por lo que el intercambio y la cooperación sobre experiencias y conocimientos en torno al desarrollo se han convertido en el tema principal para la construcción de un nuevo tipo de relación. En la búsqueda de la modernización, China y América Latina han acumulado una rica experiencia sobre desarrollo, la cual puede ser aprendida y adoptada por ambas partes. Desde el comienzo del nuevo siglo, su relación se ha estrechado cada vez más y se ha formado una comunidad de destino compartido que ha logrado apoyarse tanto en los momentos buenos como en aquellos más difíciles.
La cooperación internacional en pos del desarrollo por la cual aboga China se diferencia de las tradicionales prácticas de asistencia ya que tiene como marco de referencia la cooperación Sur-Sur, tomando el desarrollo común como objetivo fundamental, el nuevo concepto de desarrollo y el intercambio de experiencias como medios, y la mejora de la capacidad de desarrollo independiente como propósito principal. Asimismo, este nuevo ideario procura establecer un camino y un modelo de desarrollo adaptado a las condiciones propias de cada país y construir un nuevo tipo de relación de intercambio y cooperación.
Por un lado, la comunidad internacional espera con urgencia que China contribuya y comparta sus experiencias y prácticas de desarrollo exitosas, con el fin de proporcionar “soluciones chinas” y “sabiduría china” para resolver los problemas del desarrollo mundial; por otro lado, China sigue siendo el mayor país en vías de desarrollo, por lo que todavía necesita aprender y absorber continuamente las prácticas exitosas de otros países para su propio desarrollo futuro.
Debemos promover la construcción de un nuevo tipo de relación de intercambio y cooperación. Lo “nuevo” de esta relación radica, en primer lugar, en el hecho de que toma la realización del desarrollo común como objetivo fundamental, y el intercambio de las prácticas exitosas de desarrollo y experiencias en gobernanza como su principal contenido. En segundo lugar, consiste en convertir las ideas en acciones, vinculando y unificando orgánicamente la interacción del nivel espiritual y del desarrollo del nivel material. En tercer lugar, está fundada en la enseñanza de métodos y en el fomento de las capacidades propias.
Intercambio, difusión y cooperación de conocimientos
El aprendizaje mutuo para el desarrollo tiene como fondo el intercambio de experiencias y conocimientos sobre el desarrollo, y debe estar basado primero en mejorar el entendimiento mutuo. Por lo tanto, la etapa inicial para la construcción de este nuevo tipo de relación es el intercambio, la difusión y la cooperación de conocimientos, tanto para extenderlos entre el público como para promover la producción de los mismos. En ese sentido, los círculos académicos chinos y latinoamericanos tienen responsabilidades y obligaciones ineludibles al respecto.
El Programa de Cooperación e Intercambio de Conocimientos Chino-Latinoamericano (PRO-CICCLA) es una importante iniciativa mediante la cual los círculos académicos chinos y latinoamericanos han asumido responsabilidades sociales. El 27 de abril pasado, China National Knowledge Infrastructure (CKNI), la Asociación China de Estudios Latinoamericanos (CALAS), el Centro de Estudios Chinos y Latinoamericanos (CECLA), el Consejo Latinoamericano de Ciencias Sociales (CLACSO), la Facultad Latinoamericana de Ciencias Sociales (FLACSO), y la Asociación Latinoamericana de Estudios Chinos (ALAECh) decidieron desarrollar conjuntamente el PRO-CICCLA, el cual tiene como objetivo promover la cooperación y el aprendizaje mutuo para el desarrollo entre China y América Latina, contribuir al desarrollo sostenible de sus relaciones y construir una comunidad de destino entre ambas partes, a través del intercambio y la difusión de conocimientos continuos y sistemáticos. El primer paso para la implementación del programa es la puesta en marcha conjunta de los “Ciclos de Conferencias China-América Latina”.
Los ciclos de conferencias se dividen en dos partes de cuatro meses de duración, que incluyen dos series de conferencias de conocimiento general: “Ciclo de Conferencias sobre Conocimiento General de China Contemporánea” y “Ciclo de Conferencias sobre Conocimiento General de América Latina Contemporánea”, cada una con 15 conferencias. La serie “América Latina Contemporánea” es impartida por académicos chinos a una audiencia china, mientras que la otra es impartida por académicos latinoamericanos a una audiencia de la región. Sobre esta base, los copatrocinadores de los ciclos también planean establecer conjuntamente una alianza latinoamericana sobre estudios chinos con el fin de reunir instituciones de investigación y académicos latinoamericanos dedicados a estudios chinos, ayudándoles a que puedan acoplarse y colaborar de manera efectiva, y así sentar las bases que permitan fortalecer el intercambio de conocimientos y cooperación entre China y América Latina.
Otro intento de este intercambio radica en la publicación de la colecciónEntendiendo América Latina. El Centro de Estudios Chinos y Latinoamericanos y la Editorial de la Universidad de Beijing planean publicar 50 libros sobre temas relacionados con América Latina en aproximadamente 10 años, a fin de ayudar a los lectores chinos a comprender a cabalidad su historia, cultura, naciones y sociedad, y proporcionar un panorama real, tridimensional e integral a través de la perspectiva de intelectuales latinoamericanos. Se trata, en definitiva, de la primera colección de gran dimensión en China que publica sistemáticamente temas históricos y humanísticos de América Latina, por lo que puede catalogarse como un proyecto de “ilustración de conocimientos latinoamericanos”.
3 de julio de 2021. Lanzamiento oficial en Beijing de la colección Entendiendo América Latina por el Centro de Estudios Chinos y Latinoamericanos y la Editorial de la Universidad de Beijing.
A pesar de estas contribuciones, para lograr un avance constante y sostenible que tenga como objetivo fundamental el aprendizaje mutuo en aras del desarrollo, es urgente continuar con los esfuerzos en los siguientes tres aspectos:
Primero, trabajar unidos para extraer experiencias y conocimientos sobre el desarrollo de prácticas históricas en China y América Latina, realizando intercambios para compartirlos. El desarrollo social centrado en la reducción de la pobreza y la administración social es un tema teórico y práctico al que los círculos académicos chinos y latinoamericanos prestan suma atención. Al respecto, debemos conceder atención a la investigación empírica basada en el trabajo de campo y fortalecerla, apoyar y orientar a los círculos académicos en la investigación comparativa de experiencias y prácticas del desarrollo, capacitar y expandir los equipos de investigación, reunir las investigaciones e intercambiar conocimientos vinculados al tema del desarrollo, entre otros aspectos.
Segundo, promover la formación de un nuevo modelo de socios diversificados. El aprendizaje mutuo para el desarrollo entre China y América Latina es inseparable de diversos actores, tales como gobiernos,think tanks, organizaciones no gubernamentales, medios de comunicación y empresas. Todos estos son actores fundamentales capaces de promover la construcción de un nuevo tipo de relación de intercambio y cooperación de manera activa.
Tercero, hacer pleno uso de la plataforma “Diálogo entre Civilizaciones China-América Latina”, acelerar el establecimiento de un mecanismo en esta materia y tomar el aprendizaje mutuo para el desarrollo como contenido principal del diálogo. Actualmente, la cooperación general entre China y América Latina carece de una plataforma y un mecanismo para el intercambio y la cooperación de ideas, experiencias y conocimientos. Los tres seminarios del Diálogo entre Civilizaciones China-América Latina que se celebraron consecutivamente pueden servir como apoyo para incrementar el número de los interlocutores, mejorar el nivel y el contenido del diálogo, e impulsar el intercambio, la difusión y las prácticas en torno a las experiencias y conocimientos del desarrollo.