¡Hola, vida nueva!

Por ZHANG XIAO

¡Hola, vida nueva!

Por ZHANG XIAO

EN solo cinco años, la aldea de Bading, en el cantón de Chagjug (ciudad de Xigaze), que antes no disponía de suministro de agua y electricidad, ni de sistema de comunicaciones y de transporte fácil, ya tiene instalados faroles de energía solar en sus calles, red de Internet y carreteras pavimentadas. Este gran cambio se debe a la dirigencia y asistencia del equipo de trabajo acreditado en la zona del Departamento de Ciencia y Tecnología, de la región autónoma del Tíbet.

Los adultos mayores de la aldea o sus familiares reciben cobertores.

Grandes esfuerzos

Dicha aldea es uno de los puntos de asistencia en Xigaze. En comparación con otras dos, que también están bajo la jurisdicción del cantón de Chagjug, Bading está más atrasada y alejada, y era la única que no tenía acceso a la red eléctrica.

La infraestructura incompleta fue el mayor desafío para el equipo de trabajo. Dada la falta de suministro de agua y electricidad, las malas condiciones de los caminos y las comunicaciones, Bading se encontraba en estado primitivo, dependiente de la agricultura y la ganadería. Los primeros miembros del equipo de trabajo llegaron a la aldea con la misión de “fortalecer las organizaciones de base, mantener la seguridad, buscar vías de enriquecimiento, desarrollar el espíritu de gratitud y realizar trabajos prácticos”. Después de llevar adelante inspecciones e investigaciones a fondo y conocer de cerca las necesidades de los residentes, el equipo llegó a la conclusión de que mejorar las condiciones residenciales, aumentar los ingresos de los pobladores y cambiar el modelo de desarrollo económico eran la clave para transformar la situación de la aldea, y elaboraron planes para tres y cinco años.

Bajo el respaldo del gobierno distrital y del cantón, y con el esfuerzo de todos los miembros del equipo de trabajo, se instalaron las redes de electricidad y comunicaciones, se pavimentaron los caminos, se establecieron balsas para el riego de los campos, se creó el sistema de agua potable, se capacitó al personal administrativo y de servicio, se financiaron cursos para los conductores y se establecieron cooperativas especiales.

Chimed Tsering, primer secretario del comité de la aldea de Bading del Partido Comunista de China (PCCh) y director del equipo de trabajo de la aldea, señala que, gracias al grupo que lidera, el Departamento de Ciencia y Tecnología construyó cuatro invernaderos para el cultivo de verduras, un forraje de alfalfa de 50 mu (3,35 hectáreas), una planta de procesamiento de productos agrícolas, un criadero de gallinas, un pozo de agua potable y una clínica. Estas instalaciones pueden satisfacer las necesidades básicas de los residentes y mejorar en gran medida el entorno y las condiciones de vida.

“Antes las verduras que consumían los habitantes eran principalmente rábanos y patatas. Ahora con los invernaderos, consumen una mayor variedad de hortalizas de hojas verdes. También pueden moler harina y extraer aceite en la planta de procesamiento a un precio más bajo, pero sin necesidad de recorrer un largo camino”, dice Chimed Tsering.

Además el equipo también presta mucha atención a la formación de aldeanos con mejores conocimientos científicos. El equipo organiza anualmente cursos de educación científica y capacitación en tecnología agrícola y ganadera con técnicos que van a prestar servicios científicos allí. Ellos tienen acceso a una base de datos con fotos, archivos, videos y audios en idioma tibetano. También se ha instalado una red wifi que cubre toda la aldea para facilitar la consulta en línea.

Antes, el nivel educativo de los pobladores de Bading era bastante bajo, con un solo funcionario con estudios superiores. Gracias al desarrollo de la enseñanza, al respaldo político del país y al cambio de mentalidad en la gente, existen en la actualidad 120 estudiantes matriculados en la aldea, entre ellos 7 universitarios. Con el fin de resolver las dificultades económicas de algunas familias y estimular en los estudiantes la iniciativa en el aprendizaje, el equipo de trabajo y la célula del PCCh del Instituto de Investigación e Información Científica y Tecnológica del Tíbet propusieron a los empleados hacer donaciones yestablecieron el Fondo de Educación de Benevolencia de Bading, que ofrece cada semestre financiación a estudiantes necesitados.

Además, el equipo de trabajo ha establecido contactos con muchos voluntarios y organizaciones de caridad, ha recolectado ropa nueva de invierno por un valor de casi 170.000 yuanes, 1800 piezas de ropa usada, cuatro cajas de artículos de escritorio por un valor de casi 3000 yuanes y dedica anualmente 10.000 yuanes para la compra de ropa y mantas para los mayores de 60 años de edad, soldados retirados y familias pobres.

Losang mide la altura de los niños para comprarles ropa de invierno. Fotos de Gao Zhiyong

El nuevo rostro de Bading

Después de cinco años, con el relevo de cinco equipos de cuadros, la aldea de Bading tiene una nueva fisonomía. Hoy día existen en total 20 familias pobres, lo que representa aproximadamente el 40 % de las 52 que viven en la aldea, un gran avance en comparación con la situación anterior. Al mismo tiempo, con la construcción de infraestructuras, tales como carreteras y balsas, muchos residentes pueden trabajar sin alejarse de la aldea. En 2015, los ingresos de toda la aldea fueron de más de 200.000 yuanes. El nivel de vida y de ingresos de los habitantes ha registrado un alza evidente.

“Todos los miembros del equipo de trabajo están contentos por los cambios en Bading”, explica Chimed Tsering, y concluye: “Nuestro deseo es que en 2020 la aldea, junto con todo el país, logre plenamente la construcción de una sociedad modestamente acomodada”.

El XIII Plan Quinquenal (2016-2020) que se ha iniciado establece la meta de convertir a China en una sociedad modestamente acomodada en todos los aspectos en 2020. El 13 de diciembre de 2015, la Propuesta del Comité del PCCh de la región autónoma del Tíbet para el establecimiento del programa de desarrollo económico y social durante el periodo del XIII Plan Quinquenal fue aprobada. Tal propuesta define la meta de sacar de la pobreza a 690.000 personas durante el XIII quinquenio, bajar la tasa de incidencia de pobreza a menos del 5 % y aumentar anualmente los ingresos disponibles per cápita de la población pobre en más del 16 %.

El 13 de agosto de 2016, en el simposio del gobierno de la región autónoma del Tíbet con la Oficina del Grupo Dirigente de Desarrollo y Alivio de la Pobreza del Consejo de Estado, Losang Gyaltsen, presidente de la región autónoma del Tíbet y subdirector del Grupo Dirigente de Desarrollo y Alivio de la Pobreza del Tíbet, afirmó: “Exploraremos un camino con las peculiaridades de nuestra región para reducir la pobreza y desarrollarnos, para sacar de la miseria a toda la población pobre y completar de forma integral la construcción de una sociedad modestamente acomodada para 2020”.